Son noches que te hacen pensar, que te hacen replantearte, una vez más, que te hacen dudar de tus limites,que te llevan al extremo, que te producen taquicardia y a veces hasta ganas de bailar.Pero que a su vez te convencen de que todo lo que tu haces dependerá siempre de ti, de lo que puedas llegar a esperar y querer de ti, de no conformarte con poco, de no ser ambiciosa, sino tener en el presente consciente que es lo que ansias de ti misma y que es lo que no quieres para ti.Y no existe receta en este mundo para saber que se quiere o que es lo que nos espera o un mapa que nos indique donde parar y donde seguir, nunca ha existido una